Internas en el oficialismo, la oposición y la reaparición de los gobernadores

Por Rosendo Fraga.

La política exterior mostró el estilo ambiguo y contradictorio del Presidente. A principios de febrero, la visita a Moscú y el ofrecimiento para que Argentina sea “la puerta de entrada” de Rusia en la región, fue una definición peligrosa en un momento delicado, dada la inminencia de la invasión a Ucrania. Pero después el Gobierno se acercó a Washington en forma urgente, para lograr el apoyo en las gestiones con el FMI. Seguidamente, tomó cierta distancia de Estados Unidos y en la OEA votó contra la moción impulsada por este país para que Rusia fuera excluida como observador de la Organización, iniciativa que fue aprobada por amplia mayoría. Frente a la IX Cumbre de Presidentes de las Américas que se realiza del 7 al 10 de junio en Los Ángeles, después de que el Presidente de México, López Obrador, se negara a participar dada la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua, Argentina pasó a asumir la misma posición, aunque sin negarse a concurrir. Alberto Fernández hizo duras declaraciones respecto a la Administración Biden, que envió a su delegado especial para esta Cumbre, el ex senador Christopher Dodds, quien no obtuvo resultados en México ni Argentina. La diplomacia argentina, en función de la Presidencia pro témpore de la Celac que ejerce este año Fernández, convocó a una Cumbre paralela de la región, a realizarse también en Los Ángeles y al mismo tiempo. La negativa de México y Brasil -Bolsonaro decidió concurrir recién cuando se aseguró una entrevista personal con Biden- hizo fracasar la contracumbre, pero el Presidente argentino, en contacto directo con los gobiernos de Venezuela y Cuba, se mantiene indeciso respecto a si concurrirá o no. 

Al mismo tiempo, la situación interna dentro del oficialismo no sólo sigue sin resolverse, sino que también se complejiza. Sergio Massa se ha transformado en un nuevo oponente de la Casa Rosada. Impuso al ministro Martín Guzmán la elevación inmediata del piso para el pago del impuesto a las ganancias y ahora le exige una medida similar con el monotributo y los autónomos. Respecto a las tarifas, el ministro es consciente de que no podrá cumplir el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, ni tampoco con la segmentación anunciada, lo que generará malestar en el kirchnerismo. El tema de las retenciones mostró también al Presidente en una posición ambigua y contradictoria. Parece convencido de que su aumento es necesario para moderar el incremento del precio de los alimentos, pero simultáneamente quiere evitar un conflicto con el campo que genere protestas en calles y rutas. En lo político, el diálogo con la Vicepresidenta lleva tres meses suspendido por decisión de ella. El Presidente responde negándose a reunir la Mesa Nacional del Frente de Todos, en la cual está en franca minoría. Tanto el Presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, como el titular del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, sostienen que han logrado imponer puntos de vista a la conducción económica. El Ejecutivo enviaría al Congreso en los próximos días el proyecto para gravar la “renta inesperada” impulsado por el kirchnerismo. El Presidente viajó a Chaco -cuyo gobernador, Jorge Capitanich, es firme aliado de la Vicepresidenta- para participar de la mesa provincial del Frente de Todos, en un gesto conciliador. Proclamó a “la derecha maldita” como el enemigo que retornará al poder en 2023 si el actual oficialismo no logra unificarse, y lanzó su nuevo lema, “Primero la gente”, en momentos que tiene el nivel de aprobación más bajo de su gestión.

Los gobernadores han irrumpido en el escenario político nacional como no lo habían hecho hasta ahora. Dieciséis de ellos -todos oficialistas- apoyaron el proyecto de aumentar la cantidad de miembros de la Corte que impulsan coincidentemente la Casa Rosada y la Vicepresidencia. Sean quince o veinticuatro los integrantes, se diluye la actual mayoría y los gobernadores -aun los opositores- ganarían posiciones en este Tribunal, que sería de negociación política. Al mismo tiempo, avanzan los cuestionamientos hacia el ministro de Economía por los recortes en las partidas que les envía el gobierno nacional, de acuerdo al objetivo de reducción del déficit acordado con el FMI. A su vez, también han reclamado a la Suprema Corte que no convalide la posición de la Ciudad de Buenos Aires en su reclamo para que se deje sin efecto la reducción de sus fondos dispuesta por el gobierno nacional en 2021. Las tarifas son otro punto de reclamo, dado que se mantiene el fuerte subsidio al AMBA en perjuicio del interior. Los gobernadores oficialistas vienen reuniéndose en forma semanal en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), como dos décadas atrás, ante la inminencia de la crisis que estalló en diciembre de 2001. Cabe señalar que los gobernadores de Córdoba y Santa Fe, los dos de origen peronista, no se han sumado a este reclamo de los gobernadores alineados con el gobierno nacional. Paralelamente, se reunieron los diez del llamado “Norte Grande” -que son ocho oficialistas y dos opositores-, presentando diversos reclamos y acentuando su protagonismo. Los mandatarios provinciales comienzan a aparecer como una tercera posición en el conflicto entre la Casa Rosada y la Vicepresidenta.

En el campo opositor se reordena el radicalismo, la lucha interna en el PRO escala y las conversaciones con Milei se suspenden. La convención de la UCR se reunió, dejando planteada la eventual candidatura presidencial de Facundo Manes y eligiendo a su hermano Gastón como Presidente de la convención partidaria que determinará las alianzas. Al mismo tiempo, Martín Lousteau definió su opción para ir por la Jefatura de Gobierno porteña, mientras que Gerardo Morales no descartaría una candidatura a la Vicepresidencia. La convención mantuvo abierta la posibilidad de ratificar la alianza con el PRO, pero reforzó su oposición a un acuerdo con Javier Milei. En el PRO, el liderazgo que está ejerciendo Macri complica la situación interna. Horacio Rodríguez Larreta dice que no condiciona su candidatura a la decisión de Macri, mientras que da señales de acercamiento al radicalismo. El ex Presidente incorpora a María Eugenia Vidal a la pugna por las candidaturas y al mismo tiempo busca reforzar la posición de Patricia Bullrich en su competencia con el Jefe de Gobierno porteño. Las conversaciones con Milei se han enfriado por ambas partes. Para el sector anti dialoguista del PRO, continuarlas ahora es poner en riesgo la unidad de Juntos por el Cambio. Para el diputado libertario, seguirlas es debilitar su antagonismo con la “casta política”. Pero las encuestas muestran que a diecisiete meses de la elección presidencial, la oposición podría ganar, y esta probabilidad aumentará si el Gobierno sigue fracasando en materia antiinflacionaria. Pero la oposición parece más centrada en la disputa por las candidaturas, que en sus propuestas, programas y estrategia de alianzas sectoriales para alcanzar el poder.

En conclusión: la política exterior ha mostrado las ambigüedades y contradicciones que caracterizan el rol político de Alberto Fernández; ello se hace evidente en la gestión de gobierno y en las señales políticas, sumándose Massa como nuevo opositor a la Casa Rosada; los gobernadores han adquirido protagonismo político, buscando ser un centro de poder entre la Casa Rosada y la Vicepresidencia; por último, en la oposición, la posibilidad de recuperar el poder en 2023 ordena al radicalismo y acentúa la interna dentro del PRO, mientras se interrumpen las conversaciones con Milei.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s